Una gestión orientada a optimizar los servicios esenciales y un modelo con reiterado respaldo

Justo L. Urbieta

El tiempo electoral está en pleno desarrollo, aunque formalmente nada aún lo haya reconocido y, sin embargo, el movimiento de los protagonistas se torna cada vez más intensa y sería interesante que el debate fuese elevado, abandonándose la costumbre de ver en el adversario a un enemigo a ser eliminado.
Ese concepto es el más cercano a lo que demande la democracia que en 2023 celebrará 40 años de bienvenida continuidad, alejada de los tiempos en que se repetían las situaciones que postergaron su vigencia con los efectos que aún permanecen en vastos sectores de la comunidad nacional.
Recientemente desde esta columna de opinión se hacía referencia a la impresión generada por lo visto en el acto de inauguración del camping 17 de Octubre de la Delegación local de UPCN que mostró a la dirigencia política y gremial peronista y a representantes de partidos aliados en una clara mostración de unidad.
Es ella el presupuesto fundamental para hacer frente a las exigencia de los comicios de agosto y los de octubre- y eventualmente el ballotaje en noviembre- que exhibe complicaciones económicas con índices inflacionarios que le restan valor al poder adquisitivo del salario de los trabajadores y al impacto de situaciones de tensión intra-alianzas que se registran a nivel nacional.
Aquí el máximo exponente político, Gildo Insfrán, nada ha dicho acerca de lo que ocurrirá en materia de postulaciones y candidaturas ya que desde el PEP se ha privilegiado la atención de las necesidades de los sectores más vulnerables con la promoción de planes nutricionales para las familias más comprometidas y la puesta en marcha de medidas emergentes en coordinación con los municipios para aliviar las consecuencias dañinas que ha provocado la “visita” por tercer año consecutivo del fenómeno La Niña.
La acción tuvo en la Unidad Provincial Coordinadora del Agua, la dirección provincial de Vialidad y el Servicio Provincial de Agua Potable a los encargados de dar respuestas a la demanda comunitaria con restricciones en el abastecimiento de agua para atender a los rebaños ganaderos y las áreas de cultivo agrícola.
El Sistema Hídrico Provincial mantuvo su solidez, aunque ha sido visible la ausencia del insumo fundamental: el agua.
Ante ese escenario, el desafío se basó en el llamamiento gubernamental para las circunstancias emergentes: hay que hacer frente a la adversidad ya que su presencia o vence o es ´procurará vencerla.
El sentido común revela que es casi imposible enfrentar a la naturaleza y mucho menos tratar de atenuar sus efectos.
Sin embargo, con una planificación responsable enmarcada en el Modelo Formoseño se logró la permanencia del río Pilcomayo en jurisdicción formoseña y el aprovechamiento del Bermejo, aunque las consecutivas manifestaciones de La Niña no ayudaron para que el flujo de agua que escurre por los mencionados ríos aportara para aliviar con facilidad la situación.
El sistema de canales y reservorios enmarcados en el PHP permitió la disponibilidad de recursos que, con una necesaria readaptación, permitieron que se diesen respuestas a la población en emergencia.
También se trabajó en diligencias al máximo nivel nacional realizadas por el jefe del PEP que permitieron que en los últimos días se conociesen novedades positivas para el fortalecimiento del Sistema Energético Provincia entre las que figuran la reactivación del enlace con Paraguay para inyectar energía por la línea Guarambaré- Clorinda.
Se le acaba de sumar la respuesta nacional al pedido de Insfrán para que se habilite una nueva línea de interconexión en 132 kilovoltios que se extenderá desde esta ciudad hasta Ibarreta y desde allí derivará hacia General Güemes para generar un anillo con cierre en Clorinda.
Y en materia proselitista, una señal acerca de lo que vendrá tiene que ver con el pronunciamiento de la dirigencia de los partidos aliados y sublemas del peronismo formoseño.
Manifestaron que los acontecimientos y las decisiones que fue tomando y desarrollando durante su gobierno Gildo Insfrán, dejaron razones invulnerables para que los formoseños merezcamos profundizar, fortalecer y seguir disfrutando del modelo construido por un formoseño, un auténtico líder político, un guía como nadie.
Sus fundamentos se sintetizaron en el párrafo final que va despejando dudas: “Los formoseños de bien, tenemos la obligación de pedirle a Gildo Insfrán que continúe”.