Un avance hacia la construcción de una obra estratégica para la integración regional

Por Justo L. Urbieta

Acaba de ocurrir un hecho trascendente relacionado con la integración regional y la vinculación física entre dos países hermanos que quizás no haya tenido la debida difusión a raíz del complejo entramado político nacional y sus consecuencias en el ámbito local.
Se trata del avance de una iniciativa que ocupa desde hace más de una década la gestión de Gildo Insfrán de modo insistente en todos los foros nacionales e internacionales –sobre todo en el seno de la Crecenea Litoral, de Argentina, y CODESUL, de Brasil- vinculada con la construcción del puente internacional entre la ciudad paraguaya de Pilar y la localidad formoseña de colonia Cano.
Es la evidencia de que la ejecución de una obra estratégica se inicia como idea, prosigue como parte de una planificación y se desarrolla como un proceso que comprende aspectos técnicos y, fundamentalmente, financieros que permitan su realización efectiva.
Lo cierto y concreto es que, salvo imponderables, la obra comenzará en 2025 para ser terminada en 2028 y su financiamiento estará a cargo del Banco de Desarrollo de América Latina, el nuevo nombre de la conocida Corporación Andina de Fomento (CAF) que contribuyó a la pavimentación de tramos de la ruta provincial 9 que, casualmente, permite el acceso a Colonia Cano desde General Mansilla, a partir de la ruta nacional 11.

La planificación propia

El modelo formoseño consideraba esencial para dejar atrás su aislamiento la construcción de tres corredores Este - Oeste a partir de la pavimentación total de la ruta 81 (Eje Centro); de la ruta 86 (Eje Norte) y de la ruta provincial 9 (Eje Sur).
El primero de ellos de carácter bioceánico para que la ruta 81 con el complemento del nuevo puerto de esta capital y la reactivación ferroviaria -temas que están contemplados en el presupuesto nacional 2023- tenga Formosa como punto de vinculación para el comercio, la producción y el turismo de esta zona del país con salida por los puertos del Pacífico y del Atlántico a la altura de Chile y Brasil.
El segundo, para que las cargas provenientes del Brasil, Paraguay, el Sur de Bolivia y Chile puedan conectarse a través de la ruta 86 para lo cual estaría faltando la concreción del puente Puerto Pilcomayo-Itá Enramada, Paraguay, para que el proyecto cierre.
Y el tercero, es un logro de la actitud preventiva gubernamental al pavimentar la ruta 9 desde la ruta 11 para dar salida hacia el Sur del país a la corrientes turística, productiva, comercial e industrial del rico departamento Ñeembucú -cuya pujanza textil es reconocida- y con cuyas autoridades Gildo mantuvo siempre una relación fraternal que contribuyó a que se concrete este acuerdo histórico rubricado en la cumbre del MERCOSUR en Montevideo por Alberto Fernández y su amigo Mario Abdo Benítez.
Cuando el puente esté terminado se aspira que el corredor bioceánico en el que se convertirá la ruta 9 tenga continuidad hacia rutas paraguayas que conecten sin necesidad de ingresar en Asunción con vías brasileñas con salida al Atlántico.
Uno de los presentes en el acto del 7 de junio, fue el actual ministro de Industria y Comercio y ex vicepresidente del Paraguay, Luis María Castiglioni, que resaltó el rol de Insfrán como gesto de obras y actitudes que contribuyen al fortalecimiento de las relaciones bilaterales, sobre todo al admitir que siempre Formosa acogió a paraguayos en materia de empleo, salud y educación por lo que es evidente la fraternidad que recrean los pueblos de ambas orillas.

Puerto estratégico

Mencionó el carácter visionario de la obra Pilar-Colonia Cano ya que el puerto de la ciudad guaraní, capital del departamento del Ñeembucú, es de aguas profundas y permite la operatividad de buques de carga y pasajeros que operan al Norte de la hidrovía.
El proyecto es ferrovial con el agregado de vías que tendrán trochas similares a las de estados linderos del Brasil al Norte y de la Argentina al Sur, confiando en lo que ello importa para el fenomenal crecimiento productivo primario e industrial que se habrá de generar en ese polo de desarrollo que habrá de generar este emprendimiento.
Contó también que paralelamente al trazado del río Paraguay, ya se está completando la construcción de la carretera entre Asunción del Paraguay y Pilar que fortalecerá el movimiento regional que inclusive hasta ahora incluye la utilización de la ruta nacional 11 en Formosa por lo que se confía en la evolución que tendrá el área jurisdiccional de colonia Cano.
Estas son obras que trascienden a los hombres por lo que sería de alto interés que la clase política local y nacional muestre su compromiso y responsabilidad con el pueblo de Formosa y la región, sea cual fuere su origen partidario o su ideología, tomen a este emprendimiento estratégico como “causa de todos los formoseños” y dejen este rico ejemplo para las nuevas generaciones.