Quimsa igualó las finales y mañana se define al campeón
La fusión completó una gran actuación con un papel protagónico de sus dos extranjeros. Empujados por el corazón de su capitán, los santiagueños empataron la definición ante el ciclón en un partido caliente. El sábado, a las 11, volverán a enfrentarse en el determinante último juego que consagrará al nuevo campeón.
Quimsa venció 90-83 a San Lorenzo en el cuarto partido de las finales, empató la serie y forzó un quinto partido que definirá al nuevo campeón de la Liga Nacional. Mañana a las 11, en el Templo del Rock, se celebrará la última batalla entre los dos mejores equipos de la Argentina para decidir al monarca local.
La dupla de extranjeros (Robinson-Romero Fernández), que anotó 50 de los 90 puntos de la fusión, cargó con su ofensiva. Brandon Robinson, con su equipo coqueteando con la eliminación, asumió el liderazgo en otra producción descomunal como principal argumento en ataque: fue el goleador del partido con 32 puntos y rescató continuamente a su equipo cuando San Lorenzo amenazó el liderazgo santiagueño.
Robinson fue una garantía en una tarde en la que rozó la perfección: finalizó el juego con 61% de cancha y 66% de 3. Los 15 puntos que anotó en el segundo cuarto le permitieron a Quimsa tomar una ventaja de 10 puntos que posteriormente San Lorenzo pudo reducir a márgenes mínimos, escenario en el que otra vez la respuesta fue el héroe santiagueño.
Cuando Silvio Santander ajustó la marca e impulsó una presión más agresiva sobre Robinson, Ismael Romero Fernández fue determinante para atacar al aro con comodidad. El cubano fue letal en el poste bajo no solo gracias a sus 18 puntos, sino también para darle segundas oportunidades en ataque a su equipo con 6 rebotes ofensivos de los 10 que capturó en total. Romero, quien no había tenido una gran actuación en los últimos 2 juegos, recuperó su mejor versión y fue imparable para un ciclón que nunca encontró soluciones para su poderosa agilidad.
Cosolito, quien regresó tras su ausencia en el tercer juego con una codera en su brazo izquierdo por la ruptura de ligamentos y una pequeña fractura que sufrió en su codo, fue clave con su ingreso sobre el final del primer parcial para imprimirle una cuota indispensable de energía y carácter a la fusión. Diezmado físicamente, su influencia fue evidente más allá de sus 6 puntos y sus 9 rebotes en 25’.
El impacto de la banca de Quimsa también fue un factor decisivo: los suplentes a disposición de Sebastián González aportaron 35 puntos frente a los 12 de la segunda unidad de San Lorenzo. Franco Baralle, un especialista en los cierres calientes, marcó 9 de sus 15 puntos durante el último parcial y fue mortífero para sentenciar a un San Lorenzo que tendrá que ganar el sábado para conseguir el pentacampeonato.
De cara al quinto duelo que definirá al nuevo monarca de la Liga Nacional, con apenas un día de descanso entre ambos juegos, San Lorenzo deberá recuperarse anímicamente de la derrota y físicamente de una tarde exigente en la que Penka Aguirre participó prácticamente de los 40 minutos de partido y en el que tanto Nicolás Romano, José Vildoza y Máximo Fjellerup superaron los 30’. Las bajas de Dar Tucker –quien no participó en toda la postemporada– y la ausencia de Luis Montero por una fractura redujeron considerablemente las opciones de Santander. Los minutos se sentirán menos en un Quimsa envalentonado que terminó el cuarto juego a puro grito de Cosolito, el líder que no va a dejar que su equipo muera sin pelear.