EMOTIVA JORNADA
La UNaF rindió homenaje a los caídos el 5 de octubre
Parmetler, expreso que “esta fecha no pasa inadvertida para quienes, de alguna manera, hemos vivido esa época. Valorizar a nuestros héroes es algo que es muy importante para la memoria en sí, para nuestros docentes y para nuestros estudiantes”.
El viernes 4 en horas de la mañana tuvo lugar en el campus de la Universidad Nacional de Formosa una emotiva jornada académica de revaloración de los héroes caídos el 5 de octubre de 1975 en el ataque montonero al Regimiento de Infantería Monte 29.
Luego del descubrimiento de un monolito con una placa evocatoria del hecho, se llevó a cabo un acto en el que se escucharon palabras del rector Prof. Esp. Augusto Parmetler. Posteriormente, en el Salón de los Rectores de la universidad se realizó un panel con expositores del ámbito nacional, que incluyó al Ing. Carlos Sanabria, docente de la UNaF e hijo del Sgto. Primero Víctor Sanabria, héroe caído del 5 de octubre.
En el evento, que fue organizado por la Secretaría General de Asuntos Estudiantiles y Extensión Universitaria de la casa de estudios, se destacó la presencia de un grupo de veteranos del 5 de octubre, conformado por Gregorio Giménez, Daniel Quintana, Paulino Sosa, César Ginés, Gabriel Orué, Juan Carlos Soria, Rogelio Masacote, Mateo Amarilla, Severino Soto, Alfonzo Ramón Rojas y Guillermo Trinidad.
Según significó Parmetler, “esta fecha no pasa inadvertida para quienes, de alguna manera, hemos vivido esa época. Valorizar a nuestros héroes es algo que es muy importante para la memoria en sí, para nuestros docentes y para nuestros estudiantes”.
“Por eso, hemos decidido organizar esta charla e inaugurar un solar con un monolito, fijando en nuestra universidad un espacio para conmemorar esa acción y para que nunca más estemos en una situación en la que grupos sediciosos ataquen a las instituciones por el mero hecho del poder. Porque cuando fortalecemos las instituciones, defendemos la patria. El estar aquí en la universidad, trabajar todos los días, educar, y también transmitir lo que es la memoria, es defender a la patria”.
En ese marco, Arturo Larrabure, asesor de la Dirección de Derechos Humanos del Ministerio de Defensa de la Nación y fundador –junto a la actual vicepresidenta de la Nación Victoria Villarruel- del Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Víctimas, dijo que “para mí es un honor estar por primera vez en la provincia de Formosa”.
Prosiguió: “El 5 de octubre es realmente una fecha tremenda porque es el único ataque que el ejército montonero realizó como tal, vestidos con sus uniformes azules, pensando que con 30 hombres iban a poder doblegar a oficiales, suboficiales y soldados del Ejército argentino, llevándose la sorpresa del valor que tiene el Ejército argentino y que ha tenido siempre, manifestado en las épocas de nuestra independencia, en Malvinas como en todos los lugares que ha actuado a lo largo de su historia”.
“Es trágico el día, el recuerdo, pero estamos orgullosos porque llegar aquí, a esta situación, donde por primera vez en la historia lograr que se reconozcan a las víctimas del terrorismo es un trabajo arduo. Muchísima gente ha colaborado para esta instancia, así que estamos orgullosos”, enfatizó.
Agregó que “hemos formado un equipo de trabajo muy bueno y muy importante y cuando ingresamos al Ministerio de Defensa nos propusimos el primer objetivo que fue llegar a este 5 de octubre, a casi 50 años, para lograr que la sociedad argentina, no los formoseños porque ustedes reconocen el valor que han tenido sus soldados, pero hay mucha gente en el país no lo reconoce y ni siquiera sabe qué pasó”.
A su turno, Silvia Ibarzábal, vicepresidenta de la Asociación de Familiares y Víctimas del Terrorismo en Argentina, indicó que “curiosamente es un día feliz para todos nosotros y por supuesto para los parientes de las víctimas, los combatientes. Hemos trabajado 20 años colaborando con todos ellos para que se los reconozca y esto sienta un precedente”.
“Es muy importante para las otras víctimas del terrorismo. Esta unidad militar fue atacada en democracia y yo quiero remarcar esto, porque como (Juan Domingo) Perón era el presidente y era militar, muchos jóvenes pueden confundir que era un Gobierno militar y no democrático”, aclaró. “Y como estamos en una Universidad veo a tantos jóvenes que seguramente no conocen de esto, entonces fue un orgullo poder expresarnos”, remarcó.
Natividad Torales, hermana de Marcelino Torales, héroe caído del 5 de octubre, expresó que “este reconocimiento es algo muy emotivo. Me cuesta expresar lo que sucedió en aquella época, pero en este momento realmente estoy muy emocionada por el reconocimiento que le dan a los familiares y a los heridos. Y más por mi madre, que tiene 94 años, está lúcida y es la única madre que queda viva”.
También subrayó que a pesar del dolor “es un orgullo para todos los formoseños porque es una causa formoseña para la República Argentina, porque ellos dieron su sangre por Formosa y por el país. Esto reconocimiento es algo histórico, es algo que es único, y espero que sea reconocido por los demás también”.
Asimismo, el sobreviviente del ataque al Regimiento de Monte 29, el soldado clase ‘54 Daniel Quintana, comentó: “Fui herido en el combate, en defensa del RIM. Es una obligación de nuestra parte hacer recordar lo que sucedió ese 5 de octubre”.
Respecto del homenaje que hizo la UNaF resaltó que “es buenísimo que se haga en la Universidad porque muchos jóvenes se van a enterar de lo que pasó y van a tomar más dimensión del hecho. Tiene mucho valor porque antes se contaba de otra forma lo que pasó”.
Recordó que en su caso, el día del ataque de Montoneros, “formaba parte de un grupo de una compañía, la A, que estaba de guardia, y éramos unos 50 personales. En esos momentos estaba apostado en un puesto desde las 7 de la mañana hasta la 1 de la tarde. Luego me relevaron, fui al comedor y luego a descansar al dormitorio hasta las 16, que era cuando teníamos que ir a otros lugares. Ahí llegaron sorpresivamente a atacar el Regimiento”.
“Estábamos en el dormitorio unas 20 personas que nos encontramos con el tiroteo y tuvimos que tirarnos al piso. Los guerrilleros gritaban ‘ríndanse’, ‘salgan’ y seguían tirando. Una bala entró por la ventana y de rebote me pegó en la columna. Me desvanecí y mis compañeros empezaron a salir, algunos fallecieron ahí o fueron heridos”.