LOS INVESTIGARÁ EL TRIBUNAL DE ÉTICA
La UCR suspendió a los diputados que apoyaron el veto de Javier Milei a la ley de movilidad jubilatoria
Los investiga el Tribunal de Ética. Durante el proceso se les suspende la afiliación y los derechos partidarios, por lo que no pueden estar en el bloque. El órgano también investigará a Reyes y Cipollini, que se ausentaron para votar.
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Mariano Campero, Martín Arjol, Luis Picat y Pablo Cervi fueron suspendidos por el partido y dejarán de formar parte del bloque de la Unión Cívica Radical, al menos mientras dure la investigación que llevará adelante el Tribunal de Ética. La sanción es consecuencia de su cambio de posición, ya que primero votaron a favor de la ley de movilidad jubilatoria y luego apoyaron el veto del presidente Javier Milei a la norma, contrariando el mandato del partido.
Así lo decidió la mesa directiva de la Convención Nacional, liderada por Gastón Manes y Hernán Rossi, que resolvió suspender la afiliación partidaria de cuatro de los cinco legisladores disidentes. El caso de José Tournier, el quinto voto, es particular, ya que, aunque integra el bloque de la UCR en la Cámara baja, no tiene afiliación formal en el partido.
En la misma reunión se discutió la situación de Roxana Reyes y Gerardo Cipolini, los dos legisladores del bloque que, aunque no votaron en contra de la ley, se ausentaron durante el debate.
La votación en la mesa fue de 11 a 1 para elevar al tribunal los seis casos. El único voto negativo fue de Andrés Lombardi (Mendoza), perteneciente al sector radical que lidera Alfredo Cornejo, gobernador de la provincia y cercano a la Casa Rosada. Además, se aprobó por 10 votos contra 2 suspender preventivamente a los cuatro diputados que aparecieron en la foto con Milei, con el representante de Misiones uniéndose a Mendoza en la votación en contra.
La resolución sostiene: “Al tratarse el veto presidencial, cuatro diputados nacionales afiliados a la Unión Cívica Radical e integrantes de nuestro bloque se apartaron de lo que ellos mismos habían sostenido en la primera votación y acompañaron el veto presidencial, incurriendo en una grave inconducta partidaria y generando un grave daño a la credibilidad y honor de nuestro partido. Aún más graves fueron los argumentos esgrimidos durante la sesión y en los medios de comunicación, en el sentido de que se habían equivocado en los cálculos, y que su brusco cambio de opinión se fundaba en la necesidad de garantizar el equilibrio fiscal”.
Ahora, los diputados deberán comparecer ante el Tribunal de Ética del partido, que está compuesto por tres integrantes: Alicia Tate de Santa Fe, Juan Pedro Tunessi de Buenos Aires y Ricardo Barrios Arrechea de Misiones. Ellos serán los encargados de definir la sanción final para los diputados radicales.