Hoy comienza el proceso electoral en la UNaF con la votación del claustro no docente
El consiliario titular Diego Ortiz llamó a “decir basta y empezar a cambiar esta realidad” con el proceso electoral que se iniciará hoy con la votación del claustro no docente en las elecciones del claustro no docente para la categoría de representante del Consejo Superior de la UNaF. La fecha para los docentes está fijada para el 18 de agosto y hacia fines del mes votarán los estudiantes.
Ortiz indicó además que “ante los lamentables episodios de violencia que se vienen suscitando en la UNaF, la gran mayoría de los trabajadores docentes y no docentes y los estudiantes los repudiamos porque aspiramos a tener una Universidad pacífica”.
“Lamentablemente –agregó- la institución ha sido cooptada ya hace un tiempo por este grupo de violentos que se manifiesta en esta ocasión en un acto muy notorio, violentando las oficinas de la Junta Electoral Permanente, lo que motivó a una denuncia del vicerrector Vicente Sánchez”.
Respecto a los hechos protagonizados por un grupo de la agrupación Líne Azul, el Consejo Superior de la UNaF solicitó al rector Augusto Parmetler que cumpla su obligación de convocar a sesión extraordinaria del cuerpo para dar tratamiento urgente a la denuncia efectuada.
Ortiz señaló que en las cámaras de seguridad quedaron registrados y fueron identificadas las personas: “Algunos son estudiantes otros son graduados y trabajadores, pero que no representan para nada a la gran mayoría de la Universidad, quienes rompieron vidrios, destruyeron documentaciones y provocaron destrozos; no conformes con ello, luego se dirigieron hacia al domicilio del presidente de la Junta Electoral Permanente, haciéndole vivir una situación fuera de lugar, especialmente porque allí habitan sus padres que son adultos mayores”.
Asimismo, afirmó que “la violencia de este grupo minúsculo se viene haciendo notar inclusive desde octubre-noviembre del año pasado en la vida cotidiana de la UNaF, a través de pinchaduras de ruedas, hostigamiento, persecución política y otras situaciones patoteriles, también hubo caravanas hacia las casas de decanos, el nivel de violencia se fue incrementado hasta llegar a este último hecho que fue filmado, registrado y denunciado”.
El consiliario dijo además que ayer en la sede del Rectorado “hubo gente amedrentando y pretendiendo violar la paz que debe haber en cualquier proceso electoral y más aún en la Universidad”.
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Despidos injustificados
Ortiz afirmó que “desde que se incrementaron estos hechos repudiables, hubo despidos injustificados de personal no docente, que son los trabajadores que más están sufriendo esta situación debido a que hay traslados sin ninguna razón o también interrupciones de contratos de personas que venían trabajando normalmente”.
Asimismo, indicó que “pese a todo esto, en el proceso electoral hay una gran mayoría de trabajadores que dice basta y se va a poder manifestar en su voto para empezar a cambiar esta realidad”.
Volvió a reiterar que en este último tiempo “todo fue un desmanejo con tan solo dos reuniones del Consejo Superior en el año, cuando debería ser cada 15 días entre el 1 de marzo y el 30 de noviembre; hay actas de reuniones sin aprobar del año pasado y la asamblea universitaria de 2020 estuvo plagada de irregularidades y a eso se suman estos actos violentos; esperamos empezar a cambiar para darle a la sociedad la Universidad que se merece”.
Sin respuestas del rector Parmetler
Con respecto a la denuncia en el Consejo Superior, órgano máximo de gobierno de la Universidad donde están representados todos los claustros, Ortiz hizo notar que la mayoría de sus miembros (el 65% de los consiliarios) “hemos pedido 11 veces formalmente poder reunirnos”.
La última sesión fue el 7 de junio, “es decir hace dos meses, cuando el estatuto del CS marca que las sesiones deben ser convocadas por el rector en su calidad de presidente, por lo tanto todas las notas fueron dirigidas a Parmetler y el secretario académico”.
Ortiz afirmó que sin dar respuestas “la actitud del rector es inaugurar un centro de salud y hacer declaraciones en algunos medios e incluso muchas veces con actitud proselitista pagados por la Universidad; Parmetler no se manifiesta sobre estos hechos cuando el es un funcionario público con un cargo de altísima jerarquía y por ende debería denunciar a las personas violentas, ello denota una omisión y complicidad manifiesta de acción, ya que al tomar conocimiento de estos graves episodios debe promover una investigación con un sumario interno primero y luego que la Justicia en función de los actos administrativos dictamine cómo debe continuar esto”.
