En caso de repetirse el resultado de 2019, el FdT sería mayoría en ambas cámaras
Un análisis de Parlamentario permite despejar dudas en torno a lo que podría suceder en el Parlamento a partir de diciembre. Si se repitiera la elección de 2017, habría una paridad extrema en Diputados; pero si el FdT repitiera la victoria de hace dos años, superaría ampliamente el número del quórum. Cómo queda el Senado.
La carrera electoral está desatada y ya a punto de definirse las listas con los nombres de un lado y del otro de la grieta, toda la atención pasará a las expectativas respecto a los resultados. Caso infrecuente, oficialismo y opositor tienen confianza en ganar y como están las cosas, unos y otros se atribuirán la victoria cuando las urnas hayan dado su veredicto. Más allá de que está claro que los títulos de los diarios nacionales harán hincapié en el resultado en el principal distrito del país: Buenos Aires, definido desde 2005 como “la madre de todas las batallas”.
Ese es un detalle de singular importancia, qué duda cabe. Pero más que nada pensando en 2023. Porque no será lo mismo para el Gobierno transitar el resto de su (¿primer?) mandato aquilatando una victoria en el principal distrito y su más importante bastión electoral, que habiendo sido allí derrotado. O aun ganando por poco.
Pero independientemente de lo que vayan a decir los titulares del día después, lo que se juega estrictamente en esta elección es la composición del Congreso para los próximos dos años. Con un detalle no menor que es el de que Juntos por el Cambio deberá renovar los legisladores obtenidos en su mejor elección, la de 2017. Esto es, tiene que renovar nada menos que 9 diputados más que el actual oficialismo, que como Frente de Todos pone en juego 51 escaños. Un número que incluye nombres que en 2017 participaron bajo distintas denominaciones y objetivos (Unidad Ciudadana o Frente Renovador), pero que hoy conviven en el Congreso bajo un mismo techo.
En el caso de JxC, participó en esas elecciones como Cambiemos y cosechó 60 escaños. El Senado es otra historia a la que ya nos referiremos.
Lo cierto es que desde la oposición definen a la elección que viene como la más importante desde 1983. Así lo ha expresado, entre otros, el expresidente Mauricio Macri, por cuanto en estas elecciones el oficialismo podría revertir su condición minoritaria en la Cámara Baja y hacer avanzar entonces proyectos que hoy están obturados allí, como la reforma judicial o la modificación de la Carta Orgánica del Ministerio Público Fiscal.
En el Senado el Frente de Todos es hoy mayoría y todo lo que el Gobierno desea –y no necesita de los dos tercios–, pasa. Pero en la Cámara Baja es muy distinto, pues los 119 miembros al Frente de Todos solo le alcanzan para ser primera minoría, y no demasiado distanciada de la principal oposición, que tiene 115 diputados.