“El justicialismo tiene que ampliarse”

El gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela dialogó con LT25 Radio Guaraní de Curuzú Cuatiá. Lo hizo para referirse a la actualidad del justicialismo nacional con la candidatura de Cristina Kirchner y su intención de marcar la cancha también para ir por la titularidad de la orgánica peronista. De esta forma, abordó la cuestión Corrientes, haciendo referencia a la Intervención vigente y a la necesidad de replantear estrategias para llegar a 2025 como opción de poder.
Así se dio la conversación: 
—Su trayectoria y conocimiento del PJ en estos momentos tiene su importancia. 
—No buscamos un reconocimiento expreso, lo que buscamos es tratar de persuadir y convencer a la mayor cantidad de peronistas primero, luego, ciudadanos de Corrientes y de toda la Argentina de que hay una propuesta nueva, diferente que procura la unidad del Movimiento Nacional Justicialista y que procura también presentar, normalizar el partido, movilizarlo y ponerlo de pie. Institucionalmente organizar el partido, la juventud por sobre todas las cosas, mujeres con un fuerte protagonismo y convocar también a los cuadros profesionales que tiene el justicialismo en cantidades para que no solamente tengamos una propuesta electoral, sino un programa de gobierno que sea debatido en profundidad y que sea puesto a consideración de la gente. 
—En Corrientes el PJ lo tenemos intervenido hace varios años. Lo veo como algo que no está bien cuando los interventores provienen de otra provincia. ¿Qué opinión tiene?
—Pueden tener intereses particulares, tiene que ser de algunas provincias de proximidad que tengan conocimiento, por lo menos somero de lo que sucede en las provincias vecinas. Por ejemplo, La Rioja con Catamarca, Santiago con Tucumán, Chaco con Formosa, Jujuy con Salta, donde conocemos lo que sucede en Catamarca y Catamarca conoce lo que sucede en La Rioja. Corrientes sabe lo que pasa en Misiones, Misiones sabe lo que pasa en Corrientes por la cercanía y por la vinculación casi permanente que tenemos entre provincias. Por eso siempre, cuando vienen del centro del país, eso genera un poquito de rechazo. Pero, no puedo hablar mal de la compañera interventora (Teresa García) porque es una excelente compañera y estoy seguro que hace lo mejor para que pueda normalizarse lo más rápido posible la provincia, pero las intervenciones tienen que tener tiempo determinado de 6 meses, 8 meses, un año. Tiene que tener un principio y un fin para que se puedan normalizar y los correntinos determinan quiénes son los que quieran, a través de su voto, que conduzca el destino del partido. 
—En Corrientes hubo interventor del Chaco con el que lo único que se hizo fue a relevarlo a él y poner otro interventor. 
—Claro, pero por eso te digo, el tema es si tiene un objetivo que alcanzar. Tienen que tener un tiempo operatorio, obviamente se va a preocupar por eso y no interferir ni meterse en las internas, ni tener un estado de preferencias en cada una de las provincias que están intervenidas. La misma situación sucede con Jujuy, donde hay dos interventores que provienen de Buenos Aires, al igual que la interventora de Corrientes. Buenos Aires se caracteriza por ser generadora de interventores. 
Hay que priorizar las formas. Es decir, en estos procesos hay que decirle “no” al insulto, a la descalificación, no a las denuncias, sino simplemente dedicarse a presentar al electorado qué es lo que quieren hacer del PJ, cómo lo quieren organizar, con qué equipos, qué programa tienen, cómo movilizan y organizan la juventud, a las mujeres, a los trabajadores, a la rama política. Es decir, cómo movilizan al peronismo, lo ponen de pie y lo empiezan a diseñar todos juntos, un camino que tienen que transitarlo para alcanzar el objetivo, que es tomar el poder para producir las transformaciones que el peronismo cree que se debe producir en cada una de las provincias argentinas. 
—Usted habla de dar espacio a los jóvenes, a las mujeres y bueno, como hoy hablamos que, por ejemplo, usted y Rodolfo Martínez Llano son eminencias dentro del camino de la política, o sea, saben mucho más, están para enseñarnos a nosotros ¿En La Rioja, cómo está organizado el partido? 
—Primero, no somos eminencias, o por lo menos yo no soy eminencia. Soy un compañero de la trayectoria desde el 82 hasta la fecha del partido. En La Rioja está organizado el PJ, por un lado, y la rama, por otro lado. Es decir, la rama juvenil está organizada, la rama femenina está organizada y la gremial. Estamos en un proceso de la organización sindical, de las 72 organizaciones, que está organizada. Pero hoy es un sello que tenemos que rápidamente normalizar. Y la conducción del PJ está a cargo de mi persona, con una conformación muy federal, donde participan todos los departamentos de la provincia. Cada vez que se decide, se busca la mayoría que acompañe esas decisiones. La Rioja está ordenada, no tiene divisiones. 
—¿Usted dice que ese ordenamiento es difícil de ponerlo en práctica?
—No es difícil, además es conveniente, porque eso moviliza. Tuvimos el lunes próximo pasado, un encuentro de 1.500 mujeres, donde estaban las comerciantes, industriales, las mujeres rurales, las políticas, las dirigentes del justicialismo. Debatieron todos los temas que se puso a consideracióna en el temario y se tuvo una conclusión muy positiva. Pero lo más positivo fue que se encontraron, compartieron todo un día de trabajo, llegaron a la conclusión, tras un fuerte debate, y eso te genera un estado de movilización permanente y un esquema de información que se lleva a las compañeras. Todas aprenden, una de cada otra. Y se van motivados, con mucha información como para tener elementos persuasivos para que cuando se dé el caso, la sociedad acompañe al movimiento justicialista, como lo viene haciendo hasta ahora. En los jóvenes estamos preparando uno para diciembre, que va a tener la participación donde no menos de 50 jóvenes por departamento de distintos rubros, estudiantes, empresarios, industriales, comerciantes, del arte, etcétera, para que puedan confluir todos en un encuentro similar. Entonces tenemos ese tipo de organización que moviliza y tenemos las casas peronistas que son las viejas unidades básicas, que también congregan compañeros de distintos barrios, que se convierten en una suerte de centros vecinales, donde transmiten a las autoridades las dificultades que tiene el barrio. Donde cada uno se lo transmite al intendente, que le comunica al gobernador para que apruebe los fondos en tanto y en cuanto se pueda, en aquello que es viable, y se le va dando respuesta a los barrios desde el punto de vista financiero, pero siempre un poquito a cada barrio se le llega. 
Viéndolo desde La Rioja. Usted tiene mucho contacto con los compañeros de Corrientes —¿Cómo cree que se puede solucionar para que lleguemos a tener un candidato que sea fuerte y compita en 2025? ¿O ya no nos dan los tiempos acá? 
—Lo que yo visualizo es que Corrientes tiene grandes cuadros, tanto femenino como masculino, de los distintos espacios sociales y económicos que tiene. Empresariales, políticos, docentes. Conozco muchos de ellos. Y la verdad que tiene que darse la organización que permita tener una alternativa sólida y, si es necesario, constituir un frente. Corrientes lo puede hacer tranquilamente porque necesita un gobierno peronista que, bajo los principios, los valores, las banderas y las doctrinas nuestras, que hay que actualizarlas, aggionar a los tiempos que estamos viviendo, nuestro lenguaje. Tenemos que volver a empatizar con nuestra gente. El justicialismo tiene que ampliarse, y tiene que convocar a los jóvenes, básicamente. Los únicos que tienen fuerza y energía transformadora son ellos. Fundamentalmente, los jóvenes estudiantes, tanto del Secundario como de la Universidad o del Terciario, que tienen la fortaleza y están en un proceso de aprendizaje, de consolidación de conocimientos e información que les permiten a ellos poder hacer una evaluación correcta de las realidades y también cuáles son los métodos y las políticas que se tienen que aplicar para modificar las mismas. Corrientes es una provincia muy rica, en sus recursos humanos, que rápidamente lo pueden sacar adelante. Por lo tanto, los insto a que rápidamente se puedan normalizar y puedan tener una propuesta no solamente política, sino un programa de gobierno con el que el correntino se sienta identificado, que va a generarle condiciones de vida diferentes a las que ofrece el presidente de Milei ¿No? Yo no hablo mal del gobierno de la Provincia porque lo desconozco, pero sí conozco las políticas que aplica Milei, que creo que alcanza a todas las provincias por igual. 
—Milei está produciendo cambios, pero son muy bruscos y nos está ahorcando a toda la sociedad de la clase media para abajo.
—¡Vaya que está haciendo cambios! Esos cambios, no son los de edad. Son instrumentos crueles que se aplican sin importar las consecuencias.  No son cambios que la gente busca. 
Pienso que hace las cosas sin analizar los efectos colaterales. 
-Sí los analiza, sabe lo que va a suceder. Lo que no tiene es conocimiento de la realidad que tiene un país. Por eso no quiere decir que no tenga una composición ideológica o una política que lo que hace, lo hace a sabiendas y además disfruta del sufrimiento de la gente, genera políticas de inaccesibilidad o servicio. El incremento exponencial de la energía no tiene sentido. En La Rioja no se incrementó un solo peso. Tendrían que pagar, con el incremento de la energía que hizo el Gobierno nacional, por ejemplo, 80 mil pesos. La Rioja paga 18 mil pesos, 15 mil pesos aproximadamente, porque no hemos incrementado ninguno de los servicios. Estamos para garantizar que la gente pueda acceder a una calidad prestacional de los servicios y una accesibilidad. Que nada vale tener un servicio público como la energía, el agua, el gas, la conectividad o de transporte público de pasajeros, si no se puede acceder. Tienen que brindar servicios de excelencia con criterios de accesibilidad a los mismos.