Se presentó el programa Cambio climático, biodiversidad y áreas protegidas
El juez Morán visitó la reserva Guaycolec y destacó el trabajo para preservar la fauna
En la reserva Guaycolec se realizó una reunión con autoridades de distintas instituciones, con la presencia del doctor Pablo Morán, juez Federal N°1, quien destacó el trabajo que lleva adelante el Gobierno para preservación de la flora y la fauna, y se profundizó en la cuestión judicial en cuanto al tráfico ilegal.
También estuvo Natalia Elizabeth Beatriz Lupia, a cargo de la Subsecretaría de Recursos Naturales, Ordenamiento y Calidad Ambiental, dependiente del Ministerio de Producción y Ambiente, autoridades de la Policía Ecológica y el personal que presta servicio en el lugar.
En la oportunidad se presentó el programa Cambio climático, biodiversidad y áreas protegidas y de la estación de animales silvestres y se realizó un recorrido por la reserva.
Morán remarcó la importancia de la intervención que toma el Juzgado Federal cuando se trata de delitos que puedan ser interjurisdiccionales que afecten al medio ambiente, haciendo referencia al tráfico ilegal de flora y de fauna, no sólo de animales, sino también de plantas: “En estas charlas conjuntas y directas recalcamos nuestra preocupación, no sólo por los yaguaretés y los monos que están acá, que traen desde el otro lado de la frontera, sino también por los animales que son víctimas de la caza ilegal”.
Asimismo, sostuvo que “nos importa mucho el medio ambiente y por eso estamos haciendo este intercambio de ideas y queríamos ver cómo estaban los monos que rescatamos hace pocas semanas que todavía están en cuarentena y gracias a Dios y al trabajo de los profesionales están en buena evolución; si no se hubieran rescatado, ya hubieran muerto porque estaban con muy bajo peso”.
Morán indicó que están utilizando también, todas las unidades de terapia intensiva, una jaula incubadora “y algunos otros elementos que el año pasado le pudimos donar desde el Juzgado Federal para esta reserva; sacar un animal de su medio ambiente para traerlo a una ciudad y venderlo como mascota, además, de ser un delito, causa un gran daño porque estos animales se terminan muriendo”.
También explicó que en algunos casos, de acuerdo a las especies de los animales, se pueden determinar si se trata de un tráfico internacional de fauna, además, de otras pericias científicas.
Explicó que en el caso en concreto de determinarse responsabilidades de alguna persona, de algún ciudadano por el tráfico ilegal de fauna, la ley prevé que también se los haga responsables del daño causado, incluso con el decomiso de los medios de transporte utilizados: “Acá, lo importante, además, de todo lo que estamos aprendiendo de los médicos, los veterinarios, la gente del Ministerio de Producción y especialmente de la parte ecológica, es poder darles el respaldo para que sepan que la Justicia Federal está dispuesta a poner la cara y a seguir las causas vinculadas con daño ecológico”.