Aumentó un 84% el número de donantes voluntarios de sangre en la provincia

En la provincia de Formosa, el número de donantes voluntarios de sangre aumentó hasta un 84%.

La noticia fue confirmada por el director del Centro Provincial de Hemoterapia, Víctor Cambra, que destacó las colectas que se llevan adelante mediante los equipos portátiles de la institución.

“Los técnicos en Hemoterapia se encargan de la separación de los productos denominados hemocomponentes, que son todo lo que el donante entrega en cada acto de donación de 450 centímetros cúbicos de sangre, durante 10 a 15 minutos”, detalló, y continuo que “después las unidades son separadas para ser procesadas y distribuidas a todos los hospitales del interior provincial y de la ciudad de Formosa”.

Por otro lado, el especialista recordó que antes de contar con la infraestructura del Centro Provincial de Hemoterapia, los bancos de sangre formaban parte de un servicio en cada uno de los hospitales hasta donde llegaba el donante. 

“Se le extraía la sangre y luego el propio laboratorio hacia los análisis; una vez que estaban en condiciones, se hacían las transfusiones para aquellos pacientes internados en esos hospitales”, contó.

Gracias al producto del avance de la tecnología y la medicina fue posible tener un Centro Provincial de Hemoterapia: “Con una gran infraestructura edilicia, equipamiento y recursos humanos capacitados”.

Se recuerda que, su inauguración se realizó el pasado 3 de abril de este año, “y en adelante, se comenzó con un trabajo dirigido a la comunidad formoseña con la misión de lograr derribar varios mitos sobre la donación de sangre, con campañas de promoción que se desarrollan en cualquier parte de la provincia”.

Respecto al servicio de Hemoterapia, Cambra comentó que consta de dos partes: la Unidad de Donación y la otra, Medicina Transfusional. “En la primera de ellas se hacen las extracciones, es lo que denominamos los donantes de reposición, que por alguna circunstancia algún paciente internado lo necesite”, especificó.

“El donante voluntario es que salva vidas, ya que con él la sangre espera al paciente y no el paciente espera a la sangre”, concluyó.