COINCIDIÓ CON BERNI SOBRE LA PARTICULARIDAD DE LAS ARMAS UTILIZADAS
Aníbal Fernández: “Es una locura reaccionar así, ¿qué responsabilidad tiene Berni?”
El ministro de Seguridad nacional opinó sobre la agresión a su par bonaerense en un piquete de colectiveros. “La provincia es grande, no se arregla tan fácilmente. No estoy de acuerdo con las reacciones violentas”, dijo, y admitió que no habla con el funcionario bonaerense desde diciembre pasado.
El ministro de Seguridad nacional, Aníbal Fernández, estaba en su despacho de la calle Gelly y Obes cuando vio por TV la agresión a Sergio Berni. Aunque hace una larga temporada ya que lo que pesa es frialdad y distancia con quien supo ser su amigo, no dejó de causarle estupor la golpiza y los piedrazos que le dieron los compañeros del colectivero asesinado. Tanto, que lo defendió: “Es una locura lo que le hicieron, lo rechazo enfáticamente, es un despropósito, ¿qué responsabilidad tiene el? Es una locura”.
Para Fernández, endilgarle la responsabilidad del crimen al ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires es injusto: “No le podés cargar un hecho determinado a una autoridad que reacciona en función de las capacidades que tiene. La provincia es grande, no se arregla tan fácilmente. No estoy de acuerdo con las reacciones violentas, lo primero que hay que hacer es no aceptar que 20 tipos agredan así a un funcionario”.
Si bien los hechos de inseguridad son jurisdicción de las fuerzas de seguridad y la Justicia locales y el Ministerio de Seguridad nacional no tiene injerencia en las investigaciones ni responsabilidad operativa, Aníbal Fernández manifestó su esperanza de que se detenga a los responsables del episodio que terminó con la muerte del chofer Daniel Barrientos. Pero se permitió dudar de que exista “algo raro” como dio a entender Berni en una conferencia de prensa desde el Hospital Churruca, donde lo atendieron tras la golpiza.
“Vuelvo a mirar esta situación y no hay mucho para explicar, no hay elementos. Por lo que escuché en televisión tienen evidentemente alguien detenido y estarían detrás de las pistas de otros dos. Si se hace investigación profunda conoceremos los motivos porque no tiene razón de ser lo que pasó”, comentó a este medio y, si bien coincidió con Berni sobre la particularidad de las armas utilizadas en el crimen, no le parece un elemento suficiente como para sospechar de una operación política contra el gobierno bonaerense.
“Es cierto que es un arma muy rara, es llamativo en estos hechos, pero uno no puede dejar de pensar que un tipo que va a robar no se haya robado quizás un arma calibre 40 antes”, explicó, y comentó que es “la que usa la policía de Nueva York”.
“No es un hecho habitual, nadie asalta un colectivo así, cuando uno investiga estos casos no es el modus operandi habitual”, dijo Berni desde el Churruca. Tenía una cicatriz en su pómulo derecho y un hematoma marcado en la sien izquierda. Además, reconoció que le dieron golpes por todos lados y que tiene una fractura en un malar.
De acuerdo a la versión que maneja el funcionario bonaerense, los asaltantes cruzaron dos vehículos para detener la marcha del interno de la línea 620 que manejaba Barrientos y usaron armas calibre .40. La primera versión sobre el crimen apuntaba a un tiroteo entre un policía que viajaba en el colectivo y los atacantes, pero se abrieron otras hipótesis con el correr de las horas; una orientada a un homicidio a sangre fría contra el colectivero.